Cuento de hadas

Recuerdo cuando aun era una niña y mi padre me leia historias para dormir; eran historias fantasticas.

Princesas, principes, madrastras, brujos, tragedias, magia y finales felices.

He escuchado esas historias por muchos años, sin embargo, hay detalles que no puedo recordar con claridad.

Cada vez que mi padre terminaba de leerme, imaginaba mi propio cuento.

Encontrar a mi principe azul, rojo, verde o gris, me daba igual el color mientras que llegara.

Queria construir mi castillo, olvidarme de los brujos, superar las tragedias, creer en la magia y conseguir mi final feliz.

Cuando era pequeña solo queria llegar al punto donde me encontraria enamorada; donde conseguiria lo que en ese momento deseaba.

Al pasar los años he comprendido que esa, no era la absoluta felicidad para mi.

Haberte esperado todos esos años, encontrarnos y sentir que te conocia de antes, amarte y solo quererte para mi; esa es mi felicidad.

Tu eres, sin duda, mi principe; contigo nuestro hogar se convierte en mi castillo, los brujos no pueden tocarme y las tragedias son mas faciles de superar si estas a mi lado.

Contigo vuelvo a sentirme una niña, vuelvo a creer en la magia tal como lo hacia cuando mi padre me leia.

Tu, amor, haces realidad mi cuento de hadas.